Otoño es la estación de las bodas en el País del Sol Naciente. Con su mezcla de respeto por la tradición y modernidad, una boda en Japón es todo un acontecimiento.
Tradicionalmente, las bodas en Japón siguen una ceremonia sintoísta con muchos rituales. Shinzen kekkon (神前結婚) en japonés, el matrimonio sintoísta significa literalmente "matrimonio ante los dioses".
Según la tradición, los novios y sus invitados van vestidos con kimonos, beben sake y agitan ramas de sakaki antes de reunirse en torno a un gigantesco banquete.
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💘 El matrimonio en Japón, entre costumbre y tradición
El matrimonio tradicional es una costumbre milenaria. Hubo más de un millón en 1970 pero el número de matrimonios se ha reducido casi a la mitad en la actualidad. La razón es que los jóvenes japoneses no confían en el futuro económico y prefieren centrarse en su carrera profesional. Y, como en el resto del mundo, la edad media del primer matrimonio es cada vez más tardía. Se estima que en 2019 será de 31 años para los hombres y de 29 para las mujeres. Al mismo tiempo, la tasa de divorcios está descendiendo tras alcanzar un máximo de 290.000 en 2002. Hay que tener en cuenta que en la cultura japonesa está mal visto estar soltero después de los 30 años. Los treintañeros sufren de bastante presión social.
Novios japoneses. Fuente: Marisol Benítez
Originalmente, el matrimonio en Japón tenía una función social y cultural. Los omiai o "matrimonios concertados" preservaban el honor familiar, desarrollaban alianzas políticas y garantizaban un futuro seguro. Aunque esta práctica, originaria de los samuráis, estuvo muy extendida hasta los años 60, hoy prácticamente ha desaparecido, dando paso a los matrimonios por amor. Al mismo tiempo, el atractivo de las bodas románticas y modernas al estilo occidental está explotando en Japón. Sin embargo, las tradiciones siguen muy vivas en el archipiélago, y las bodas tradicionales sintoístas están lejos de desaparecer.
✅ Los pasos previos a la boda
Para celebrar una boda tradicional sintoísta, los futuros esposos deben pasar por el proceso de compromiso, que es una obligación legal en Japón, además de un compromiso moral.
💍 El compromiso: un requisito legal en Japón
La ceremonia tradicional de compromiso es una comida, organizada entre las familias de los futuros novios, respetando las fechas favorables del calendario budista. Se consulta el horóscopo chino de la pareja.
La comida de compromiso es el primer encuentro oficial entre las dos familias. Los novios reciben regalos simbólicos según las costumbres japonesas. La novia recibe un cinturón de kimono (Obi) para representar las cualidades femeninas, mientras que el novio recibe un par de pantalones tradicionales (Hakama) como símbolo de su fidelidad.
Se distribuyen otros objetos típicos, 9 en total, para atraer la buena suerte: un barril de sake, monedas de un céntimo para el vino, un abanico, un abulón, cáñamo, algas Konbu, sepia, bonito y dinero.
💓 La boda civil: el último paso antes de la ceremonia sintoísta
Para poder celebrar su matrimonio, la pareja debe primero oficializar su unión mediante una boda civil. Se trata más de una formalidad administrativa que de un acto simbólico. Basta con un simple documento acompañado de los sellos de los contrayentes. La declaración debe inscribirse en el Registro Civil del ayuntamiento del futuro lugar de residencia de la pareja.
En Japón, el hombre debe tener al menos 18 años y la mujer al menos 16 para poder casarse. El matrimonio entre personas del mismo sexo está prohibido, y los cónyuges deben tener el mismo apellido.
🎎 Una boda sintoísta en Japón
Los novios y sus familias entran en el santuario sintoísta. Fuente: Yoav Aziz
Aunque las bodas de estilo occidental están de moda en el País del Sol Naciente, las bodas sintoístas encarnan la boda tradicional en Japón. Se trata de un acontecimiento muy importante para las familias que tienen un presupuesto especialmente elevado. Al igual que en la ceremonia de compromiso, la fecha de la boda se elige según las fechas más favorables del calendario chino para garantizar una unión prometedora. Por eso, la mayoría de las bodas sintoístas se celebran en otoño y, a veces, en primavera.
Las bodas tradicionales solían celebrarse en casa del novio, pero ahora tienen lugar en un santuario sintoísta en el que se realiza una pequeña ceremonia a la que asisten familiares y amigos íntimos. El sacerdote dirige la ceremonia, ayudado por unas jóvenes llamadas miko.
👘 Traje de boda tradicional japonés
Traje de novia tradicional japonés.
La novia se viste, peina y maquilla durante largas horas. Lleva un kimono blanco de manga larga llamado shiromoku, un obi y un abrigo largo. Su peinado consiste en un moño, normalmente una peluca, y un gran tocado blanco. Como accesorios lleva un abanico y una bonita caja con un peine y un espejo.
Como las geishas, lleva la cara cubierta de polvo de arroz, los ojos delineados en negro y la boca pintada de rojo.
El traje tradicional del novio es más sencillo. Consiste en un Hakama, un tipo de pantalón ancho y plisado, y una chaqueta Haori de color oscuro.
😇 La ceremonia religiosa
Ritual san-san-kudo y toma de votos.
La ceremonia comienza con ritos de purificación de la pareja, seguidos de oraciones y el famoso ritual San-san-kudo, en el que los novios intercambian 3 veces una copa de sake. Cada copa representa el pasado, el presente y el futuro.
A continuación se intercambian los anillos de boda y se pronuncian los votos. Finalmente llega el momento de las ofrendas y los bailes tradicionales en honor de los kamis (deidades japonesas). Se entregan ramas de sakaki a los novios para unirlos a los dioses. Los dioses las agitan en un ritual muy específico. Para finalizar la ceremonia, las dos familias comparten sake para simbolizar su unión.
🍸 El banquete de recepción
El banquete de recepción también es un momento muy codificado. Los invitados, más numerosos que en la ceremonia sintoísta, entregan un sobre con dinero como regalo de boda: 30.000 yenes para una persona sola y 50.000 para una pareja, para ayudar a los recién casados a sufragar los gastos de la boda. Hay que tener en cuenta que la suma debe ser un número impar para no traer mala suerte a la pareja. El sobre que se entrega a los novios está decorado con un nudo irrompible que simboliza el amor eterno.
Durante la recepción, la novia cambia varias veces de atuendo, a menudo se viste con un Uchikake, seguido de un colorido kimono y un acaba con un vestido de novia occidental. El banquete nupcial se ameniza con discursos, proyecciones de vídeo, espectáculos y otros entretenimientos para deleite de los invitados. A continuación se abre un barril de sake en el ritual de apertura del espejo para celebrar la nueva vida de los recién casados.
Durante la velada, la familia del novio paga tradicionalmente una dote a la familia de la novia. Hoy en día, el dinero suele entregarse a los recién casados. Tras la comida, la sesión de fotos señala el final de las festividades. Como la cortesía es un valor fundamental en Japón, los novios dan un discurso de agradecimiento y no olvidan mimar a cada invitado con regalos.
Las bodas occidentales están de moda en Japón
Boda occidental en Kioto, Japón. Fuente: Kristin Wilson
A la vanguardia del romanticismo y la modernidad, las bodas occidentales atraen a muchos japoneses. De hecho, representan la mayoría de las bodas actuales.
Un vestido de novia blanco para la dama, un traje para el caballero: el kimono se queda esta vez en el armario, porque el glamour está a la orden del día. Aunque las bodas cristianas son muy populares en Japón, esta religión sólo afecta a una ínfima parte de la población. De hecho, esto no es un problema, ya que muchos hoteles ofrecen edificios e incluso sacerdotes falsos para hacer realidad el sueño de tener una boda occidental.
Hoy en día, las bodas occidentales están de moda, y hay innumerables capillas falsas que se utilizan como lugares de ceremonia. Sin embargo, el matrimonio tradicional sigue profundamente arraigado en la cultura japonesa.
